Colorear con el ordenador los dibujos realizados sobre papel, es una operación bastante sencilla, una vez hayamos aprendido la técnica. La primera dificultad de la elaboración digital está en el hecho de que el escáner recoge las infinitas variedades de colores y detalles y los organiza en píxeles: por lo tanto a cada pixel le corresponde un color levemente diferente del anterior. En este tutorial veremos como uniformar las zonas...
FIGURA 1 |
1) para colorear un dibujo sobre papel utilizando el ordenador, hacen falta: un buen ordenador (que pueda trabajar con la gráfica de manera eficaz), un buen software para la elaboración de imágenes (The Gimp, Photoshop, Paint Shop Pro, ecc.) y un escáner;
2) empezaremos dibujando con el lápiz, en un folio blanco y limpio, procurando llegar a un resultado que alcance las siguientes características (la figura 1 tiene un estilo demasiado complejo y ésto lo hace "desordenado"):
3) llegados a este punto no añadiremos ningún color y escanearemos nuestro trabajo con una resolución de 200 DPI o superior, dependiendo de la potencia del ordenador con el que vamos a trabajar;
FIGURA 2 |
4) ahora abriremos el archivo de la imagen con uno de los programas de elaboración de imágenes, y buscaremos, en los menús, las herramientas para la regulación del contraste. Normalmente los parámetros que hay que regular son: brillo, contraste, y a lo mejor "gradación";
5) ya que no existen unos valores fijos, alteraremos esas dos o tres variables hasta llegar a una imagen detallada con sólo dos colores (blanco y negro, fig.2) en vez de una escala de grises (fig.1); en este caso hemos regulado los parámetros de la siguiente forma: contraste 100/100 y brillo -67/100 pero, como ya hemos dicho, todo depende de como haya sido trazado el dibujo, del papel y del software;
6) una vez tengamos la imagen de dos colores, pasaremos a la primera parte de la coloración (en esta fase podríamos utilizar incluso programas menos específicos, como por ejemplo el Paint de Windows), y llenaremos las zonas - que hemos procurado dejar bien cerradas, en fase de dibujo - a nuestro gusto;
7) en caso de zonas abiertas o detalles perdidos (por ejemplo el resplandor en los ojos, en la fig.1 y en la fig.2), tendremos que corregir las "faltas". Al principio se suelen cometer muchos errores, que ralentizan el trabajo, pero con la experiencia y la práctica todo mejorará;
FIGURA 3 |
8) la segunda y última fase de la coloración consiste en el añadir los efectos de luz y de sombras y, en caso de necesidad, unos filtros que vuelvan a equilibrar unas combinaciones de colores "excesivas" (por ejemplo aplicándole a todo el dibujo un "velo" del color predominante);
9) tras haber coloreado el dibujo a nuestro gusto, (y después de haberlo completado con los efectos), podemos reducirlo al tamaño original y utilizarlo como queramos;
10) acabaremos con unos consejos útiles para el desarrollo de "proyectos digitales" de este tipo: